Tal vez en la parte de la "P" es donde más dificultades encontramos dentro de la PNIc, tanto como pacientes como terapeutas. Es un campo que intentamos evitar día a día, bien porque no nos manejamos en él, bien porque ni siquiera consideramos su importancia o bien porque no tenemos tiempo para atender las necesidades que surgen en esta parcela personal tan "banal". Cierto es que nuestro legado cultural nos ha educado para crecer en lo material y lo racional y eludir lo psicoemocional y espiritual. Pero nada mas lejos de la realidad que esta dimensión humana es causa y consecuencia de muchos de los procesos patológicos que nos rodean día a día y más en nuestra loca y estresante rutina diaria. Por mucho que evitemos reconocer la existencia de nuestra parte emocional, con diversos síntomas nos avisa que está desatendida y necesita dedicación. Hay veces que tarda más en darnos "el toque" y otras se hace notar inmediatamente. Pero siempre nos avisa... otra cosa es que nosotros desoigamos las señales de alarma. El cuerpo tiene una capacidad de curación "finita". Es decir, tras muchos intentos de solucionar los problemas que van surgiendo, se le agotan los recursos y la energía, y es entonces cuando notamos los síntomas. En la parte psicoemocional pasa lo mismo; tras muchos intentos de "autocurarse", al cerebro se le acaban los recursos y enferma.

Muchas patologías clasificadas como trastornos mentales (fobias, depresión, miedos patológicos, ansiedad, TOCs...) no son más que la muestra de que tras muchos años de sufrir, el cerebro no puede más y lo manifiesta así. Igual que tras un sobre-esfuerzo o una práctica deportiva inapropiada, al músculo se le agotan sus reservas de glucógeno y proteínas para autorepararse y se lesiona con una rotura de fibra.

Somos química hasta en nuetros pensamientos. Bien, a través de lo que pensamos podemos generar cambios químicos cerebrales, o cambios químicos cerebrales pueden influir en nuetra forma de pensar y relacionarnos con el medio.

Pero no sólo podemos quedarnos en el nivel de la química o la suplementación, porque entonces todo sería muy sencillo.... También hay que darle tareas al cerebro para que aprenda a "Funcionar" de nuevo de una forma correcta y sana para el individuo.

Es aquí donde entra en juego la "TERAPIA BREVE ESTRATÉGICA" (TBE)

 

 

QUÉ ES LA TBE

Para empezar, es un tipo de terapia conductual "centrada en las soluciones". Algo que es verdaderamente importante para el paciente, ya que le hace protagonista de su propio proceso de autocuración. Siempre explico a mis pacientes el mismo simil:

 -Si estuvieras ahogandote en un río, muchas terapias como el psicoanalisis comenzarían a prguntarte; qué ha pasado, por qué te tropezaste, cómo era la piedra, piensas que algún antepasado tropezo también, qué sientes al estra ahogandote, disfrutas o quieres que te saque...? Mientras que la TBE, te lanza un palo para que salgas del río y luego, ya se investigarán las causas para que no vuelvas a caer....